En una callecita del barrio del Born de Barcelona, en la calle Barra del Ferro, a escasos metros del Museo Picasso, reluce el Museo Europeo de Arte Moderno cuya arquitectura es digna de admirar.

MEAM es un espacio que cuenta con una historia que lo hace particular. El edificio en sus inicios fue un antiguo palacio creado por el acaudalado mercader de tejidos Francesc Gomis, en 1792. Durante la invasión napoleónica el mariscal Lecchi, al frente de las tropas francesas, convirtió este edificio en su residencia habitual. Posteriormente se abrió la calle Princesa para facilitar la conexión entre el casco más antiguo de la ciudad y el parque y el castillo de la Ciutadella. Fue entonces cuando el edificio quedó partido en dos, a ambos lados de la citada calle.

El Palacio sufrió diferentes cambios y remodelaciones a lo largo de los años y en 2006 la vivienda fue adquirida por la “Fundació de les Arts i els Artistes” cuyo director encargó su rehabilitación al arquitecto Jordi Garcés, autor de otras restauraciones de importantes museos de Barcelona. Finalmente, en 2011, se presentó al público este espacio tan maravilloso y singular que hoy traemos al blog, y en el que se han sucedido grandes exposiciones permanentes, temporales y presentaciones de renombrados artistas de escala internacional.

El antiguo Palacio Gomis cuenta con diferentes salas para albergar eventos. La entrada al museo nos recibe con una gran puerta que da paso al Patio Barroco, un espacio de 110m2 decorado con varias esculturas de mármol de artistas del siglo XX que producen un impacto visual único y singular. El Patio Barroco cuenta con un ascensor que conecta con las diferentes salas del museo facilitando así el movimiento dentro del edificio.

El espacio permite celebrar actos de todo tipo, desde conciertos, conferencias, actos privados y de empresa, hasta celebraciones informales. En Guía Singular nos imaginamos una cena de gala como fin de un pequeño congreso, una conferencia sobre un tema artístico, un concierto, una conferencia de prensa… todo ello en un ambiente cálido, que no necesita más decoración que la propia elegancia de las estancias.

En la primera planta de MEAM encontramos la Sala Noble, una habitación neoclásica que nos presenta de forma exquisita el arte de las antiguas Roma y Grecia. La gran Sala Noble, de una altura de 10 metros, está coronada por una cúpula con relieves de bailarinas, hojas y otros ornamentos. La superficie de la sala es privilegiada, 65m2 de planta cuadrada cuyas paredes están decoradas con diferentes columnas que hacen del espacio un lugar bello y artístico.  A menudo se puede disfrutar también de cuadros de la colección del propio museo.

Si hablamos del aforo de la sala, esta puede ser utilizada para banquetes en los que unos 50 comensales sentados podrán vivir una experiencia única. Para actos más informales, de pie o conferencias con sillas en teatro, la capacidad de la sala es de alrededor de 100 personas.

Los servicios de la Sala Noble son diversos, cabe destacar que dispone de baños y acceso directo de office y cocina, con entrada independiente para el servicio de catering.

La planta noble en su totalidad se puede complementar con el Patio Barroco, creando así un conjunto de espacios único para cualquier evento. El patio y la escalinata sirven como lugar de bienvenida mientras que toda la planta noble es adecuada para recepciones informales de hasta 400 personas gracias a sus 450m2 de superficie. También se puede plantear para banquetes con mesas de 10 personas, hasta un máximo de unas 14 mesas (140 personas).

Por último, MEAM cuenta con un agradable y pequeño salón dedicado a eventos más íntimos. Gracias a su decoración y a la calidad de la obra expuesta, la sala de 30m2 se convierte en un lugar muy especial para celebrar actos de reducidas dimensiones, de entre 10 y 12 personas.

¿Qué os ha parecido el espacio? ¡Para empezar, merece una visita para admirar el arte que presenta e imaginar la puesta en escena de una celebración especial!